martes, 25 de diciembre de 2012

Post stick

Querido YO,

Te has vuelto a perder,

todos tus miedos, paranoias, hipocondrias,

el pensar que eres feo, que tu personalidad jamás podría

ser lo suficientemente atractiva para nadie, esa inseguridad en 

cada paso, esa sensación apocalíptica de que todo va a salir mal 

y de que tu mundo puede

derrumbarse, desaparecer en un abismo en cualquier momento,

TODO, todo aquello que hace brotar tu fiebre, tu impaciencia y  

orgullo

todo, todo, todo 

queriéndolo sin quererlo vuelve a repetirse.

Toda buena historia de terror tiene una segunda parte,

y esta parece ser mejor que la primera,

lo único que ya todo te suena.

Pero no te preocupes,

esta vez,

pase lo que pase,

como ya tuviste que hacer en más de una ocasión,

saldrás adelante,

te mirarás al espejo

y te verás atractivo,

cerrarás la puerta

y comproborás que, en efecto,

nada más cerrarla,

otras se abrirán,

y aprenderás, 

pese a las lágrimas,

a vivir solo y en paz contigo mismo,

y a valorar tus sentimientos

aprenderás a perdonarte

porque dejarás de culpabilizarte por sentir

sentir que no puedes respirar

que tu sangre deja de circular

que tu mente se paraliza

que tu cuerpo se eleva por calles frías y pedregosas como una 

pluma

cuando le ves, cuando le recuerdas, cuando lo mencionan, cuando 

le sueñas...


Sin embargo,

sí que dejarás de sentir que no eres inteligente

por no poder controlar cerebralmente tus impulsos

y terminarás por aceptar que no eres un robot

que eres humano

que la vida te da lo que después te quita

que no siempre obtienes lo que te mereces 

pero sí que todo sucede por alguna razón

y que no hay que temer al amor, ni convertirlo en una obsesión

que obstaculice cada uno de tus movimientos

No permitirás que tus miedos se encarguen de hacerlo todo por ti 

y te olvidarás de ir sembrando minas por cada rincón, 

buscando tu propia muerte e infelicidad.

No le echarás la culpa a tu pasado, y le guardarás respeto pues

ya no se encuentra en tu presente

y por fin aprenderás a dejar de juzgarte y verte en otros ojos

porque en ese momento recordarás que también tienes los tuyos

y que son preciosos.

Serás valiente

Serás sincero

Serás fuerte

Querido YO, sé que diga lo que te diga no me escucharás, 

ni siquiera te pararás a pensar en el sentido ni repercusión 

de estas palabras, 

de hecho volverás a caer, habrá más próximas,

meterás la pata hasta el fondo

seguirás clavando alfileres en tu corazón hasta el final de tus 

días

Pero,

esta noche

más que nunca,

te mereces un abrazo,

y recordar que hay una parte de ti 

que aún te quiere y sigue estando contigo. 




sábado, 22 de diciembre de 2012

Existencialismo que me asalta cada vez que tengo que hacer un trabajo

Nuestras vidas son préstamos, Dios un banco, y los intereses aquellos sueños que nos hacen sobrevalorarnos. En el fondo no somos más que energía hecha capital circulando de mano en mano, sin saber por qué existe ni para qué está aquí. Desde que nacemos cumplimos con una función, que ejecutamos inminentemente cual cordero o cual verdugo, sin pararnos a pensar porque, entre otras cosas no tenemos tiempo, en cuál es el sentido de todo. El caso es que a veces me pregunto si los humanos tenemos verdaderamente capacidad de razocinio, o quizás sea una mentira más, genética, predeterminada, con la que ya nacemos. Nacemos manipulados y luego todo se complica. ¿Qué es la vida sino un préstamo más? Quizás sea una única y gran mentira con muchas verdades, tantas como intereses.

jueves, 6 de diciembre de 2012

Reflejos en la tierra

Juega con su presa, como una orca asesina

autómata de sí mismo, de su naturaleza,

juega conmigo, me muerde, me desangra

Con una manipulada mirada,

me convierte en su víctima

y sabe que no podré apenas moverme

ni un paso 

ni unos centímetros

porque en sus ojos dejo de ser yo

y sin mediar palabra alguna

muero porque sus labios se junten con los míos

y me lleven

muy lejos

a la oscuridad del océano donde

quiero que me ahogue, 

que me arrastre hasta el fondo.

No me importa respirar

mientras sean sus manos las que rodeen mi cuello.

Y sin contemplaciones me mutila, 

despedaza mi alma que es feliz por unos segundos

y luego,

la abandona rota en la eléctrica marea

con una sonrisa cínica

que me apuñala por dentro.

Aguantaría flotando, desgarrado en la mar

pereciendo mientras otros animales 

devoran mis restos, amargos,

mis lágrimas nocturnas

mis heridas diurnas

el deterioro de mi piel

mis ojos vestidos de luto

el litio de mi estómago

el veneno de mi cabeza

Aguantaría flotando

Esperaría inquieto,

Moriría rezando

temblando, soñando

Durante años y años,

ola tras ola,

aguantaría...

flotando en la angustia,

por ver mirarse el cielo de cada día

en el espejo de sus ojos, 

donde hoy lloro ante mi reflejo.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Locura extraterreste

Miedo, 

por ti hoy escucho mi respiración a través de agudos sonidos cardíacos que, en forma de balazos certeros, llenan mis noches de fiebre y desnudez divagando sin rumbo por calles gélidas y silenciosas, 

Miedo, márchate, porque sin tí no tendré la sensación de que muero sin morir, de que vivo sin vivir...

cualquier cosa haría

porque me dejase amarle

cualquier cosa

porque te fueses

y libre me dejases amarle

cualquier cosa haría por él, sí

cualquier cosa que él o el destino me pidiesen

aunque esto me llevase a un lugar tan lejos de la tierra

que ni la poderosa y penetrante luz de sus ojos alcanzase a 

alumbrarme

Un lugar tan lejos y extraño a este planeta,tan vacío y húmedo que en la oscuridad me matase el recuerdo de sus brazos rodeando los míos

Cualquier cosa, haría cualquier cosa por besar con fuerza sus labios... 

por él 



Mi vida ya no me importa

perderla sería un descanso

un infierno del que me marcharía

elevándome a velocidad infinita

en una pequeña y lúgubre nave

llevando tan solo conmigo

una foto,

olor a pasión agridulce

y un inmortal recuerdo.




sábado, 24 de noviembre de 2012

"No te des por vencido, aún vencido" MB

Por alguna razón que desconozco
todos mis errores vuelvo a repetirlos
siguiendo una especie de espiral...

Como si mi vida ya estuviese predestinada
sigo mis pasos errantes
con la felicidad de un niño y con la amargura de un suicida

Una vez más
el cuchillo pesa sobre mi piel

La vida tiene sus transiciones
sus procesos

Hay preguntas que surgen cuya respuesta cuesta entender
si alguna vez llega a comprenderse
pero es así, sin más

No voy a huir
No esta vez
Conseguiré ser feliz aquí

En este frío paraíso
En este gélido infierno


"No te des por vencido, aún vencido.

Haz lo correcto, las cosas malas siempre vienen fácil,
pero no olvides que tienes que hacer lo correcto.

Puedes hacerlo

Que este mundo no pueda contigo"




martes, 6 de noviembre de 2012

Dulce Muerte Dulce

Sueño y serás
Noche eterna 
de amor

Un crujido
en mi pestaña
Bello claro de sol

Susurro
en mi ventana

Fuego
leña
una canción

Nube negra
Una nostalgia
Silenciosa distracción

Sueño y serás
Tierra mojada de ayer
que húmeda en la montaña
borre mis huellas
 y mi piel 

Sueño y serás
Sueña y seré
Beso dulce
que en tus ojos
siembre cada amanecer

Sueño serás
Sueño seré
Foto antigua
Una sonrisa
Flores secas en el paraíso

sábado, 27 de octubre de 2012

Orgullo Oscuro

La doble cara de la luz me acerca
inminentemente al infierno

Quemar cruces
bendecir rosas
arrancarme la ropa
desesperado
Mentiras, Mentiras, Mentiras

Me arrodillo desnudo
hirviendo
para ser pisoteado
pues lo único que me otorga
 algo de afecto
es el pie que me golpea y me presiona el pecho
contra el suelo

Qué te cuesta fingir
 mirarme
darme tu mano
y

Fingir, Fingir, Fingir

Compartir este momento

Salgo cada noche
 borracho de muerte
la única verdad
que me escapa

Pedir susurrando una de amor
Silencio, Silencio, Silencio 

Esqueletos de hombres
se tambalean a mi alrededor
mientras sus huesos se resquebrajan

"No me miréis así
No soy lo que estáis buscando
No soy de nadie

No soy lo que quiero ser
No soy lo que queréis que sea
No soy, no seré
No sois, no seréis
No nací hecho para nadie"

melancolía, ansiedad, inseguridad
miedo, hipocresía, envidia
el cielo se torna de intensos rayos rosas, rojos y negros

Mentiras, Mentiras, Mentiras

En el cementerio se desentierra el sol 
haciéndome preso
del destino

Guardáos vuestra agonía
los venenos que queráis depositar
en los labios que entrecierran mi corazón

Frío
tengo mucho frío
abrazadme
asfixiádme en vuestro cuerpo 
huesudo, helado y torturado
pues nunca sentiré
el calor de aquellos ojos
que reflejados en los míos
 pestañeen mis secretos

Y poco a poco
me iréis matando
tan adentro
que la herida jamás será vista

y cuando llegue mi hora
expiraré entre recuerdos rotos
soñados un día
de lo que nunca tuve
de lo que no pude amar

Puñales de realidad y deseo
deslizáos por mi piel 
y
alcanzad mis entrañas

Llegada la oscuridad eterna
bendecid mi tumba

"alma joven
que se va
sin haber sido amada, 
encuentra tu camino
en la expulsión divina"

cenizas
viento
llanto
mentiras
indefirencia
sangre
muerte 

Silencio, Silencio, Silencio


Liberado y aislado
joven y muerto 
Silencio,
acompáñame en esta larga noche
me siento muy solo

viernes, 12 de octubre de 2012

Un enigma nocturno como una voz lejana en la mañana

¿Dónde estás?
¿Dónde está?
¿Dónde lo buscas?

¿Dónde estoy?
¿Dónde estás?
¿Dónde está?
¿Dónde lo busco?

Grita la noche
Expulsa dióxido negro
Que duerme
En mis labios

Muere
Se ahoga
¿Dónde estás?

No lo encontrarás aquí
Aquí no está

Lo escondí
 Lo ahogué
Lo maté

Imposible verlo más


sábado, 6 de octubre de 2012

PUTAS FOTOS II

4 años después de que confesara al mundo mi fobia a las putas cámaras de fotos, estoy aquí derrochando inteligencia y escribiendo un segundo artículo sobre esos malditos aparatos que tantas almas se han llevado para colgarlas en Facebook...Efectivamente, si hace 4 años tenía por qué temerles...(esa nariz...ese ojo más grande que el otro...esas ojeras congénitas...) Ahora con el hipermegaultradesarrollo de las redes sociales lo que antes era un pistola ahora se ha convertido en una bomba de destrucción masiva...

Sí, sí...con las redes sociales todo se complica...Incluso cuando vas de tio seguro de ti mismo así por la vida diciendo que te importa una mierda que suban una foto tuya en la que salgas peor que un retrato de Cecilia Giménez...Tú, que jamás te has desetiquetado de una foto, porque sí tronco, porque ya no eres un adolescente, eres un adulto molón y te aceptas como eres, lo pillas? Y a quien no le guste que se toque la polla o se meta la mano en el coño...Bueno, a lo que me refería, que es un error garrafal, porque la peña por joder sube las fotos sin ningún reparo ni miedo a que tu madre o hasta tu abuela las vea, ESE es el verdadero problema...porque que las vea el chico o la chica que te mola y le provoques arcadas cada vez que se cruce contigo por la calle se acaba superando tras años de terapia...pero los continuos reproches de tu abuela y de tu madre NO. 

Y mientras reflexionas sobre cómo soltar con seguridad la frase de "esta foto no es de ayer mamá" o la más trend ever de "este no soy yo, no es lo que parece...", decides callar bocas subiendo una foto en la que sales "cuki" (por así decirlo), provocando ganas entre tus seguidores de que te den un abrazo a lo perro pachón, al mismo tiempo que les haces ver por tus gestos que estás un poco mosca...pero que en el fondo eres blandito...Está muy claro, si existe un talento al alcance de todos es el de sacar fotos de los demás en las que los pilles desprevenidos, feos, feísimos de escupir con moco (aunque luego con toda tu bondad les digas: "No digas eso, si sales muy bien, si se ve que sales bien" (Obviamente no sale bien y tu no lo ves porque vas cieguísimo).

Esta vez es la tuya, vas preparado con la cámara digital y dos paquetes de pilas de los chinos, el smartphone o la reflex para aquellos a los que les gusta fardar de vintage y de osea, cómo es esa palabra...perdonad, osea le tengo que preguntar a mi amiga Magdalena, osea Muffin, porque no la tengo registrada en el vocabulario de mi Iphone five, sabes? Total, que sales de fiesta preparado para liarla con maldad al día siguiente en facebook, pero tu don de gentes (y los vinitos: al final de esta entrada voy a parecer un alcohólico) hacen que pierdas la cabeza, en ocasiones, la cena recién cenada o lo que viene a ser el tal aparato fotográfico...y lo que pasa, que te quedas sin venganza y con un bulto antiéstetico en el bolsillo durante lo que queda de noche, porque si eres gordo no te importa llevar un bulto más, pero si estás delgado, llevar un bulto pronunciado en un lugar que no sea el paquete resulta antiestético. 


Y ahora me preguntarás acerca de ese adjetivo "estético". Si te das cuenta, en cada foto salgo diferente, la pose, el ángulo, la barba, el pelo, los morritos...Sinceramente, lo estético es tan superficial como subjetivo y lo último que pretendo es implantar mi modelo de lo estético porque sería imposible. Sí que es verdad que existe un programa que utilizo para protegerme de los hachazos de la cámara, aunque lo único que retoco suele ser el contraste (arma de doble filo donde las haya), el balance de colores y los bocadillos para los diálogos. Otra cosa que quería aclarar es que puedes hacerte 1.001 fotos y seleccionar únicamente la 789 y la 225, pero otra persona en tu lugar hubiese escogido la 
666 y la 999 por lo que esa sensación de seguridad que tienes cuando, encantado de la vida, subes una foto de perfil es FALSA.



Como decía, el programa que utilizo se llama PhotoScape y es bastanta asequible. Pasarse con el Photoshop en plan Madonna o cargarte de contraste en plan Christina Aguilera no resulta natural y la gente que es muy lista (o muy hija de puta) lo nota. No hay nada como ser natural, sobre todo porque no siempre serás tú el que lleve la cámara. Tiene que haber fotos tuyas feas para que pueda haber fotos bonitas (y sí, yo también me cago en esos cabrones que salen bien en todas las fotos, aunque te escondas detrás de ellos, les empujes en plan "acojónate que aquí la llevas" y dispares, logran poner algún gesto o mueca y la foto se la acabas pasando a regañadientes para que la deje enmarcada al día siguiente en su casa, justo al lado de la foto de comunión).

En fin, ¿que a qué le llamo yo "ser natural" o tener una pose natural? Pues es muy sencillo, no siempre tienes por qué enseñar toda tu caja de dientes por muy perfectos que los tengas o mucho dinero que te hayas gastado en el dentista (queda estirado, vulgar y en ocasiones no nos apetece ver lo que has estado comiendo antes...). Si  tienes los dientes torcidos, amarillos, unas encías a lo shark o llevas brackets te diría que genial por ti si te apetece mostrarlos porque le estás echando muchos cojones que tendrán que verse compensados con una personalidad potente que atraiga o dar con gente interesada o con la autoestima lo suficientemente baja para que no escapen de tu lado (también puedes encontrar a personas que te acepten tal y como eres pero yo aún no las he visto o no las he querido ver). Cambiando de tema...he de decir que, personalmente, he encontrado una fórmula para salir en las fotos que pocas veces falla: elegir un perfil de tu cara bueno (entre dos gemelos sabemos que siempre hay uno malo) y nunca salgas de frente en plan "foto carnet", eleva un pelín la barbilla y dibuja en tu cara media sonrisa arcaica, en plan egipcia, ni mucho ni poco, la sonrisa en un punto medio, si no muestras los dientes mejor, y si sacas un pelín los morritos para que tus labios parezcan más gruesos siempre que quede natural te hará más sexy e interesante a la vista de amigos que puede que te redescubran y de desconocidos con ganas de violarte.



No obstante, pienso que el párrafo anterior es un poco chorra y se puede interpretar de diferentes maneras tanto el concepto "estético" como mi opinión. En resumen y a lo que quería llegar, después de todo, es que lo verdaderamente importante es que te aceptes a ti mismo, incluso cuando sales feo o te digan feo, o se rian de ti, o lo que es peor: cuando te ignoren y finjan indiferencia. Porque, aceptándote, conseguirás quererte, y queriéndote conseguirás querer a los demás, y queriendo a los demás, conseguirás que te quieran. Así de simple. Una foto no dice lo que puedes decir en persona y una persona tampoco dice siempre lo que quieres oir (pero ese es otro tema). Lo dicho, quiérete a ti mismo y quiere a los demás, y disfruta echándote fotos, compartiéndolas, opinando, riendo, criticando...disfruta observando el paso del tiempo, el paso de tu vida, porque es tu vida, las fotos son la prueba de que estás vivo, el recuerdo de que has vivido y de que, de alguna manera, has dejado testimonio. Sé quien quieras ser, independientemente de tu físico, no hay nada más importante.










jueves, 4 de octubre de 2012

Gris amniótico

Un día sin más recuerdas tu infancia, te vienen a la cabeza aquellas imágenes en las que eras el rey de la casa, el niño de anuncio guapo y mimado que recibía toda atención y capricho.
Ahí es cuando te preguntas en qué momento perdiste tu infancia, cuándo te empezaron a invadir pensamientos oscuros y qué cambió en ti para que tu familia te quitase el papel de señor y te otorgase el de siervo. En qué momento dejaste de pensar en ti, en qué momento antepusiste tu honestidad a todo lo demás, en qué instante decidiste entregar tu felicidad por la de ellos, en qué día se te ocurrió que tu vida no valía la pena ser vivida y que no opondrías resistencia alguna a una cuchilla. Quizás pensaste que si ellos eran felices tú también lo serías, pero hay veces que los cauces de la felicidad son egoístas y no siempre se puede dar un paso importante sin hacer daño a los que tienes más cerca. Por eso decidiste marcharte, para no hacerles daño, para ser honesto contigo mismo. Pasó el tiempo, mucho tiempo en tu barca con tus maletas, sobre un mar de aguas negras, luchando por ser feliz, solo, libre sin horizonte, en la distancia anhelada...pero no lo conseguiste. Tu mirada nostálgica se perdía en el gris de las nubes, la fría humedad del cielo rodeaba tu cuello con sus manos y apretaba brutalmente. De repente, una gigantesca ola irrumpió en tu barca y caiste al mar. Las olas te arrastraban hacia lo profundo, cada corriente era aún más fría y poderosa.  Tu cuerpo se hundió cual plomo en pocos segundos. Sin embargo, cuando menos lo esperabas, cuando estabas a punto de ahogarte unas manos fuertes te agarraron del brazo y te impulsaron hacia arriba a una velocidad vertiginosa. Abriste los ojos, incrédulo, y te viste en una ciudad grande y extraña, en medio de una enorme muchedumbre que caminaba a tu alrededor sin mirarte pero pendiente de cada uno de tus movimientos. Los habitantes de la ciudad no estaban ni vivos ni muertos, eran zombies que deambulaban en un mismo sentido, devoraban los mismos sueños y  se divertían engullendo la carroña putrefacta del suelo. Corriste, pero en la huida sus manos te alcanzaron y comenzaron a desgarrarte, ropa, piel y músculos...nervios y vísceras. Poco a poco tu cuerpo quedó detenido en la masa. Destrozado a mordiscos, caiste sin aliento sobre los huesos de tus rodillas. Tus ojos se tiñieron de sangre, tu visión se empapó de color rosa, mientras el blanco de tus huesos asomaba entre el rojo de litros de sangre. No sentías dolor, lo único que te importaba era tu corazón, si también se lo comerían, si acabaría formando parte de esa carroña nauseabunda que se descomponía en el espacio entre el bordillo de la acera y la carretera. Preferiste no pensar y tu mirada volvió a posarse en el cielo gris que viéndote se escondió detrás de un arcoiris para llorar. Tu corazón, latiendo cada vez con mayor ritmo ante la agonía se desencajó de tu pecho y recorrió estómago y esófago abriéndose paso para salir por tu boca. Cual globo de helio que escapa a unas excéntricas manos infantiles, se elevó entre los zombies sin dejarse atrapar por sus destructivas manos. Tomó rumbo hacia el arcoiris y mientras lo veías alejarse tus ojos entristecidos y ensangrentados se cerraron y, segundos más tarde, tus labios besaron el silencio sepulcral. Al poco tiempo, volviste a abrir los ojos, estabas en un avión, tu corazón había vuelto y sonaba en tu interior, con una melodía distinta. Se te acercó una azafata: -Señor ¿desea un caramelo?, pronto aterrizaremos. Contestando afirmativamente y tras meter la mano en la cesta, te llevaste uno de los caramelos a la boca, sin darte cuenta estabas sonriendo. Pocos minutos después, el avión aterrizó en un desierto, te desabrochaste el cinturón despacio haciendo tiempo para que saliese el resto de pasajeros, sin embargo, los pasajeros que viajaban contigo habían desaparecido. Sólo quedabas tú en el avión, tú y la azafata: -Perdone, qué ha sido de los otros pasajeros-preguntaste. -Los últimos que quedaban se bajaron en la parada anterior -¿Y los pilotos?¿Dónde estamos? -Estamos en casa, este avión funciona automáticamente, no necesita pilotos. -Esta no es mi casa, esto es un desierto. -Busca la vida en el desierto y encontrarás el camino hacia tu casa. Sin saber por qué, quizás por la confianza que te inspiraba aquella desconocida, te bajaste del avión y en medio del desierto comenzaste a buscar la vida. Tras pasar varios días andando y muerto de sed sin encontrar vida pisaste un objeto que crujió al instante. Era un marco cuya foto reconociste al momento, era una foto de una mujer, una mujer que sostenía un bebé en brazos en un hospital. Su sonrisa iluminó tus ojos. Esa mujer era tu madre, ese bebé eras tú. Empezaste a llorar desconsoladamente mientras abrazabas con fuerza el marco. - Mamá, mamá... Cada lágrima contenía miles de litros de agua que se derramaron sobre la tierra árida y sin vida. Querías abrazarla, querías ver a tu madre y abrazarla. Del agua de tus lágrimas comenzaron a surgir brotes de plantas, plantas que en seguida crecieron, se esparcieron y se elevaron alcanzando gran altura. Repentinamente aparecieron millones de flores de múltiples colores. Te llamó la atención una amapola que creció a tu lado, atraido por su rojo intenso y por su fragilidad decidiste besarla. Tras el beso te quedaste dormido. Despertaste en una cama, desorientado. Hacía mucho frío y olía a leña quemada. -"¿Dónde estoy?". Al rato escuchaste un ruido...eran unos pies que corrían hacia tu cama. - Buenos días hermano, qué guay que estás ya en casa. Te quiero. Abrazaste con emoción a tu hermana pequeña, comprobaste cuánto había crecido y comprendiste que pese a los cambios la querías tal y como era y la seguirías queriendo siempre. Te acordaste de tu madre, en ese momento apareció por la puerta. -Despierta vago. -Estoy aquí mamá. - Ya te veo. -Abrázanos. Tu madre os abrazó y ráscandose disimuladamente el ojo izquierdo salió de tu habitación y se dirigió a preparar el desayuno. -Estoy en casa, cariño- le dijiste a tu hermana.  -¿Me notas cambiado? - Estás más delgado. -Siempre he estado delgado. - Pues entonces estás como siempre, en casa y como siempre. Tu hermana salió de la habitación y se fue a ver la tele. Te quedaste reflexionando acerca de esa última frase..."en casa y como siempre". Estaba claro que estabas en casa, pero no como siempre. Algo en ti había cambiado, sabías que estabas en casa y lo más importante, sabías que querías estar en tu casa. Pensaste que para no volver a huir había algo que tenías que cambiar, había algo que tras una precipitada y duradera adolescencia nunca tuviste opción de madurar y mejorar: la relación con los tuyos. Así llegaste a la conclusión de que antes de volar del nido, estar tranquilo y ser feliz contigo mismo, primero tenías que conseguir eso mismo con tu familia. Ser sincero contigo mismo y con ellos, y a partir de ahí empezar a construir. "Construir", esa era la palabra que elevaba y reforzaba aquellos antiguos cimientos caídos. Ibas a construir en un lugar donde había gente que te quería, donde te sentías agusto a pesar del sufrimiento vivido y ante un futuro cargado de incertidumbre. Te diste cuenta que nunca necesitaste buscar otro hogar porque el tuyo ya lo tenías, así que te levantaste de un salto y corriste hacia el salón donde te esperaban para desayunar. Mientras te bebías el café miraste el marco, aquel marco que abrazaste en el desierto. Sonreiste y tu corazón empezó a engullir chocolate. "Qué suerte tengo, que suerte más grande".









martes, 4 de septiembre de 2012

TODO UN LUJO (19/08/1936)


Qué lujo tener tiempo para leer libros
Qué lujo el sol, el pan moreno y un atardecer en una playa mallorquina
Qué lujo el pa amb oli, el queso de Mahó y la sobrassada
Qué lujo estar tranquilo
Qué lujo no tener nada que hacer y estar tranquilo (dolce far niente)
Qué lujo sentir que vuelvo a estar feliz y a ser yo mismo
Qué lujo tener el poder de mirar al pasado con calma y benevolencia y sentir que, a día de hoy, no necesito vivir de los recuerdos
Qué lujo reconciliarse con uno mismo y con los demás aunque sólo sea durante unas horas (o minutos)
Qué lujo perdonar a aquellos que no están presentes y asumir los fracasos
Qué lujo darle a cada cosa su justa importancia
Qué lujo mi familia
Qué lujo mis amigos
Qué lujo las palabras de Elisabeth Gilbert y Terenci Moix
Qué lujo vivir sin miedo a la forma y contenido de mi expresión
Qué lujo tener la suerte de recordar la memoria de un poeta granadino, muerto prematuramente y poder mirar en esa fuente que nos dejó para sumergir mis ojos en la sangre derramada que libre permanece y libre se pierde en los ojos cerrados del ayer.

domingo, 12 de agosto de 2012

En el amanecer

La vista blanquecina
La piel desgarrada
El calor asfixiante
Un repentino escalofrío...

Me duermo
en mis adentros
honestos, sinceros
hipócritas y sucios

Y rehuyo de mi ser
despreciado, utilizado y masacrado

Por no ser quien soy
Por ser quien querían que fuera

Y ahora por culpa del hombre
Precisamente por ser un hombre

Llevo una cruz
Ardiente en las entrañas

Y dos clavos en mis muñecas
Que me impiden tocarte.

Dos clavos en los pies
que me impiden correr a buscarte.

Soy corazón
Corazón que sangra
que está solo

Corazón que hoy
llora por tu abandono

Y a los infiernos desciende
3 días

Y en su fuego resucita
Respirando en sus humos las cenizas
De días de lluvia y gracia bendita

Sobre la tierra caminará mi alma
En su suelo habitará lo que fue

Y en tus ojos veré mis ojos
cuando me lleve en el amanecer.

lunes, 30 de julio de 2012

Lo que diría Carrie Bradshow


De pronto me di cuenta de que no existía una fórmula perfecta para enamorar a una persona, que el juego del amor aburría cuanto más se forzaba y que los mentiros@s siempre acababan perdiendo.
Con el tiempo, el péndulo de la justicia retorna a su punto de equilibrio, nunca hay malos quehaceres sino malas elecciones y el sexo lo complica todo aún más al arrinconarnos entre el instinto y el razocinio, principal motivo al que debemos achacar nuestra delirante bipolaridad humana-animal.
Por otro lado, el tan famoso Carpe Diem, ¿sería posible aplicarlo al amor? Está claro que al amor animal sí, pero ¿al amor romántico, existencial, esa concepción tradicional y astral que impregnó los pensamientos de tantos poetas y -digamos también-, los de tantos cristianos?
Y para terminar un caso práctico: un día vas con prisa porque llegas tarde (Ej: te cierran Zara (por poner un ejemplo accesible) justo el último día en que tienes que descambiar los pantalones que sólo te pusiste para ir a una fiesta, en la que NO ligaste, puesto que, de lo contrario, SÍ que te los habrías manchado y que, efectivamente, pese a todo, te los manchaste, no sabes de qué, aunque a la mañana siguiente tras echarles todo tipo de detergente,
lograste quitársela) y resulta que tienes tanta hambre que tienes que comer si no quieres desmayarte cual actriz de bollywood. De modo que, por casualidad (y no porque te hayas distraido mirando a un wenorro) descubres en una callejuela un restaurante francés (sí, francés, ¿qué pasa?), divino, con muy buena pinta aunque el precio se excede un poco para un día así...por otro lado, a sólo unos metros, aparece frente a tus ojos en una gran y ancha vía ese adictivo y tan recurrido Mcdonalds...La elección es sólo tuya y las posibilidades múltiples:
A--> Pasas de entrar al restaurante francés por el precio y porque piensas que tardarán más en preparar la comida, así que te vas al Mcdonalds y te encuentras con que está atarragado de gente, te cerrará Zara y el precio te saldrá caro en relación a la calidad de lo que estás comiendo.
B--> Entras al restaurante francés y descubres que no era nada del otro mundo, que sí, que muy bonito y muy romántico pero en comida y eficacia cero patatero y, además, caro (WTF).
C-->Entras al Mcdonald, inesperadamente no hay nadie (seguro que están en el restaurante francés, je, je), comes rápido y logras tu objetivo de llegar a Zara a tiempo con las patatas deluxe en la garganta y una llamativa mancha de salsa deluxe en tu viejo pero querido jersey azul.
D--> Entras al restaurante francés, la comida te la sirven rápido, además está deliciosa y el sitio es tan romántico y cuki, aparte de ofrecer un menú tan variado que podrías comer allí todos los días y encima, al terminar, te das cuenta de que aunque estás a tiempo, ya no te importa descambiar esos pantalones puesto que te pegan con la camisa que tienes pensado comprarte y te creas un conjuntazo de muerte con el que "arrazas por donde pazas".
E--> Pasas de arriesgar y te quedas sin comer, te vas a Zara y por el camino te das cuenta de que, aunque sea el último día en que podías descambiar los pantalones, es domingo y está cerrado (sí, pasa mucho). C´est la vie...
Conclusión: sea cual sea la decisión que hayas tomado, por el motivo que fuese, nunca te arrepientas, tu vida es tu vida y es única e irrepetible, las malas decisiones no siempre condicionan malos sucesos y si de los momentos oscuros en los que somos vulnerables se aprende algo es a vivir sin tomarnos las cosas tan en serio, a aceptar que ante todo somos personas y cometemos errores y no, no estoy defendiendo el Carpe Diem, defiendo la dignidad humana contra los pensamientos negativos que nos vuelven autodestructivos, a veces concientemente (adicciones, tristeza, melancolía...etc) o de manera inconsciente (pérdida de personas que te importan,enfermedades psicosomáticas, fenómeno espantapájaros, conductas desadaptativas...) y que nos impiden disfrutar de lo que tenemos, que por poco que nos parezca, por muy altas que sean nuestras expectativas, siempre es mucho. El miedo es una lápida muy pesada. Nunca dejes que te caiga encima. Y si te cae, que te penetre con fuerza.

jueves, 26 de julio de 2012

La balanza del paraiso

Escucho dentro de mi respiración palabras que no existen. Mírame. Me tienes, me tienes. Miras hacia otro lado. Miro al suelo. Me despido de ti, hasta siempre.
Tus ojos, mi duda, tu deseo, mi miedo...¿Cuándo?
Amarte por siempre sin tocarte, tocarte y morir tras unos segundos...
No resisto, no.
Sin poder contenerme
Rompo a llorar
Mi cuerpo se borra
Mis ojos difuminan sueños lejanos
Y con lágrimas me duermo en los silencios que gritan a tus oídos
Despierto de nuevo, pensativo
Más mi pensamiento desaparece si te escucho
Y mis labios vuelven a abrirse
Inconscientes
Para respirar profundamente
Para reir
Y ser feliz
por un pequeño momento
un momento
diminuto
fugaz
que vale toda una vida de espera...
Y en seguida...
Vuelvo a despertar

domingo, 17 de junio de 2012

Cuando solo te derrotas a ti mismo


¿Qué sucede cuando la única persona que puede derrotarte, vencerte, destruirte, humillarte, flagerlarte, maltratarte no es otra que tú mismo?
¿Somos humanos realmente o es una cualidad humana el actuar como animales?
Todos tenemos un lado oscuro. Todos nos traicionamos a nosotros mismos e incumplimos aquellas normas y aquellos principios que tan delicademente escogimos. Todos estamos rodeados por miles de moscas que se posan sobre nuestra piel y  hunden sus patas en nuestros ojos, cosquilleándonos de manera insoportable, para luego mordernos, acabar con nuestra paciencia, y así convertir el camino hacia la muerte en una tortura indigna.
Formamos parte de una sociedad de moral antinatura que nos hace frágiles, inseguros, autodestructivos...
Todos somos carne de cañón. Todos fallamos alguna vez. Somos bombas preparadas para explotar en cualquier momento.

¿Por qué sentimos?
¿Por qué pensamos?
¿Por qué sufrimos?
¿Por qué esta imagen nos golpea la conciencia?

La conciencia sí, maldita conciencia...
La honestidad, sí, honestidad cobarde.
La vida, ¿Qué es la vida?
La vida es hambre de sueño con final vacío y eterno.

Pero la muerte, ¿qué es la muerte?
y ¿qué sucede cuando sin conorcer la muerte, deseas morir?

domingo, 8 de abril de 2012

El título de este blog no tiene sentido

Al despertar del sueño pensé que te amaba porque sin dudarlo un segundo entregué mi vida por ti. Quizás solo sea una fantasía frustada, quizás si llegase ese último momento pensaría que mi vida es más importante y me negase a intercambiar mi sino por el tuyo.

También puede ser que piense demasiado en cosas que no se piensan...

No puedo no pensar

Puedo no parar

Quiero quererte

No quiero sinos diferentes

Llámame loco porque realmente lo estoy

Llámame loco porque donde quiera que me busque te veo caminar

Llámame loco porque sin ojos intento ver lo que nunca tuve, sin oídos escucho lo que nunca dijiste y con mis labios beso una flor muerta hace 7 años

Rendirme no pienso sin pensar en lo que no estoy haciendo

Me da igual todo, no pararé...

Y un día quizás

Me convierta en ese polvo enamorado

Y deje de no ser

aquel, este, ese,

que con tu sangre enrojece sus labios

domingo, 1 de abril de 2012

Dios de mi mismo, víctima de lo humano

Con el pasar de los días mis palabras pierden su sentido, las flores secas manchan todo lo que un día escribí que poco a poco, con el olvido, se queda sin vida, sin ti, sin tu sombra y dulcemente, como el rostro de un cadáver, mi cara se desdibuja en la angustia...

No escribiré más, porque no ya habrá manos que quieran consolarme

No viviré más, porque ya ni mi cuerpo puede sujetarme

Hundido estoy, más humano que nunca

Ahogado en las arenas movedizas que mi naturaleza débil ha creado

Como víctima pequeña y oscura

Hoy seré el humilde banquete

De un ecosistema cargado de depredadores voraces

martes, 6 de marzo de 2012

Querido Blas:


Dando por hecho que nunca podré olvidarte, escribiré sobre ti, por si el viento pudiese acaso llevarse lo escrito y con ello el recuerdo de un cuento de final triste.  No quería empezar pasteloso, pero estoy escuchando mientras escribo algunas de las canciones más bonitas de Shakira, de sus primeros discos, así que es inevitable, como diría la canción.

No sé nada de tu vida últimamente, salvo que estás más gordo, que eres un friki de la política y que estás con un chico que de físico deja bastante que desear. No te culpo por tu gusto o desesperación, te lo mereces por algunas de las frases que dejaron mi autoestima reventada y pisoteada, más de lo que ya estaba. Solo espero que el afortunado que esté contigo no se parezca en absoluto a mí en el terreno personal, pues eso sería lo que más daño me haría.

Cada vez que te escribo encuentro un nueva razón de por qué mepasaloquemepasa contigo. La culpa no es tuya, faltaría más...(supongo que si no hubieras nacido me habría pasado con otro y NO, no quiero pensar con quién hubiera podido ser), hasta ahí comprendo, aunque luego me pierda.

No es amor (para empezar: ¿qué es eso?), está claro. Sin embargo, siento que nunca más volveré a sentir por alguien aquellos latidos entrecortados que me precipitaban a buscar tus ojos cada día.

Quizás nunca me enamore y créeme que ya no trato de convencerme porque ni siquiera sé lo que es el amor, ya llegué a ese punto en el que tampoco me importa. Me alegró mucho que lo pasaras mal estos últimos años por causa de una pérdida familiar, esta es la confirmación más parecida que encuentro al hecho de que, pese a todo, nunca te he querido. Pues me da igual que sufras, que se alejen de ti y que te hagan daño.

La respuesta a todo, seré sincero: llegaste en un momento de mi vida en el que trataba de sobrevivir a unas circunstancias familiares hirientes, de base, profundas que me empujaban, poco a poco, hacia la autodestrucción. Intenté amar, aunque no fuera correspondido, y quizás ese intento sin respuesta fue lo que me salvó. Te daría las gracias, pero fue un mecanismo propio de defensa.

Otras posibles causas: la bipolaridad, los abismos, la incertidumbre, la inseguridad, la baja autoestima, el miedo a la muerte, el deseo de ser normal, el deseo de ser aceptado, los retos, o simplemente los designios de un destino cargado de sarcasmo...nos impulsen a buscar en determinadas personas, que en muchas ocasiones no tienen nada que ver con nosotros, ese tipo de aceptación, esa seguridad y equilibrio, esas manos, esos abrazos, esos besos, esas palabras que un día nos faltaron.

Sólo me arrepiento de lo que no hice, por eso no puedo olvidarte. Volvería al pasado, me acercaría un momento a la salida donde solíamos esperar a nuestras madres y te diría todo lo que no te pude decir de la forma en que quería. Bien sé que no hubiera cambiado nada, pero podría haber hecho tanto si hubiera dejado de un lado el orgullo, si no hubiera intentado poner a todo el mundo en tu contra, si no hubiera atacado todas tus ideas, tu forma de ser (y de vestir...). Te pido perdón por todas las cosas que hice sin que te dieras cuenta.

Si no te hubiera culpado, si no me hubiera culpado, si no los hubiera culpado, de alguna forma u otra....hoy no estaría tan lejos....supongo que estaría más cerca y quién sabe si no hubiera tenido la oportunidad de estar a tu lado. Al menos, es donde me gustaría estar ahora.

En estos años he escrito mucho, escribiendo me he dado cuenta de que los humanos somos bipolares y como persona bipolar que, por cierto, no soy, te vuelvo a dar la bienvenida a mi vida por si acaso un día pensaras en irte.

lunes, 27 de febrero de 2012

No moriré joven



No moriré joven, porque si la muerte es puta todavía no conece a este libertino.
No moriré joven, todavía no me he casado ni he tenido hijos.
No moriré joven, aún no he conseguido el trabajo que siempre quise.
No moriré joven porque todavía no he partido con un te quiero, una caricia y un adiós.
No moriré joven porque todavía no he gastado una putada grandísima ni he metido la pata hasta el fondo.
No moriré joven porque todavía no he sido drogadicto ni he estado ingresado en un hospital psiquiátrico.
No moriré joven porque no escribí el best-seller ni la canción ganadora de Eurovisión 2020.
 No moriré joven porque todavía no he amado lo suficiente para darme por vencido.
No moriré joven porque tengo salud y una familia que me quiere (incluyo a las perras).

No moriré joven porque llevo la cuenta de aquellos deseos que conforme se van realizando nos empujan poco a poco hacia la muerte, y aunque por miedo lo niegue, son muchos los que aún se esconden en este saco de piel y huesos que deambula sin rumbo por la carretera del destino.

lunes, 13 de febrero de 2012

Vivir sin miedo

Recortando trocitos de recuerdos, ahogándome en la nada sin hacer de ella un abismo...me derrito y en el silencio se calma la angustia. La angustia vital, el sin vivir que me da vida, el miedo que me crece y sin embargo, me hace grande, me hace humano. No soy nadie, tú tampoco pero yo, además, no sé vivir, o al menos lo pienso mientras todavía respiro con dolor agudo en el pecho. Y me pregunto: ¿Cuándo seré polvo? ¿Tendrá algún fin la existencia? y mientras hiervo en ansiedad entre la realidad y los pegasos, que bien me salvan, bien me estrellan, al igual que la realidad que bien me besa, bien me atropella. Y ya no espero nada, nada de la nada, nada de nadie. Vivir, que ya es mucho, sin ninguna gana, por inercia, tragando con dificultad mis días, mirando a los demás con una sonrisa falsa, haciéndoles creer que estoy contento con mi vida, que lucho y me esfuerzo, que soy feliz. Una gran falacia, una gran felación corrosiva. No soy feliz, llevo mucho tiempo sin serlo y lo peor es que no sé lo que busco ni adónde voy, aunque quizás ahora lo peor sea que ni tan siquiera quiero saberlo. Ahora ya podéis estar contentos todos lo que alguna vez me envidiastéis, todos los que alguna vez pensásteis que era ejemplo de algo. Todos los que no sabíais que cada vez que me levanto llevo el peso de miles de cadenas y que hoy, sin embargo, mis huesos rotos se hunden sin fuerzas, porque no sé VIVIR, VIVIR, VIVIR
sin miedo.

sábado, 11 de febrero de 2012

Mi batalla por la vida

Roto, deshecho, pinchado, sangrado, despellejado, arañado con mis propias uñas asisto vertiginosamente al fin de mis días. Conectado, enchufado, unido, ligado a una máquina sensible instalada por defecto, difícil de parametrar, me hundo en la más profunda de las camas eléctricas que me inyecta dósis de sal, agua, antibióticos y morfina. Voy en busca de mi fin, sin quererlo, ansiándolo, buscando sorbos de muerte que no me sepan a veneno. De una forma inconsciente, ingenua, lerda, degradante, destructiva, me enfrento a mi mismo sin ningún arma salvo una risa estrepitosa o una llovizna gris y contínua. Ya no me domino, ya no me controlo, todo me posee, nadie me toca. La fiebre llega y el silencio, la angustia y la lejanía, el grito agónico de mis ser torturado que pide clemencia y a su vez se reafirma sobre su condena eterna. La pena, mi máxima pena, aquellos que me quieren, no los que fingen mostrarlo, aquellos que verdaderamente me quieren, por los que vivo. Y dudando de mis palabras en cada momento, como si viviese en una realidad sin base humana, manteniendo la mirada de las sombras, resquebrajándome una vez más, partiéndome en dos lucho contra mí otra mitad, contra mis fuerzas aniquilativas, contra la puta sombra de la vida y la muerte, contra la pesadumbre permanente de lo que piensen, contra la clara figura de un chico mimado, mediocre, indefenso, sin autoestima, muerto de miedo por la vida, que en horas como esta, en desarraigos como este, en minutos inminentes, en segundos repentinos, agarra un cuchillo afilado y se autoflagela.

A veces me pregunto por qué muchos jóvenes se ofrecen voluntarios para ir a la guerra, a menudo pienso en aquell@s que con dedos, hilos y agujas desinflan sus vidas, aquell@s que, en un día apacible, hacen estallar tanto sus entrañas como las de otras personas. Me pregunto qué es lo que les empuja a desear la muerte, me pregunto si queda alguien en este mundo capaz de permanecer con los ojos abiertos. ¿Y si yo no fuera diferente? Desgraciadamente, aunque duela, ya no es una pregunta. Y mis fuerzas, mis ganas de sobrevivir, las incógnitas, los futuros, los pasados, se acuestan en el silencio de mi presente buscando un nicho donde dejarse morir.

Sin embargo sueña, sueña descansar cual paso más en la arena, como una ceniza que libre al fin de lo que fue se deja acunar en la brisa de un océano.